VIENDO LA VIDA PASAR U OTRO DIA MAS SIN VERTE...

Hace unos días comenzó la epidemia de las vacaciones en muchos centros laborales, colegios y universidades. Las calles parecen otras, aunque no es lo mismo que ocurre en otros paises, donde la gente abandona sus ciudades para ir de vacaciones a otras ciudades más cálidas o en busca de aventura.

Este no es mi caso, y es que como nueva trabajadora ( menos de un años) debo quedarme a ver como todos abandonan sus oficinas; sonrientes me dicen hasta pronto y dan la media vuelta apresurando el paso.

Bien, como les dije ESTE NO ES MI CASO, y no lo volveré a repetir, pues siento que decirlo y pensarlo me pone un poco más tensa de lo acostumbrado. Sonrio de medio lado, como quien se resigna a unas futuras vacaciones próximas... quizá setiembre u octubre.

Visto desde otro punto de vista, estos días tambien me dejan tiempo libre y aunque no estoy en Iquitos, los Caminos del Inca o Paracas ( por ir cerca nomás) puedo disponer de este período(*) para disponer hasta cierto punto de él como quiera a pesar de estar entre cuatro paredes, frente a una computadora; esperando la hora de salida. Y allí viene nuestra inventiva para poder pasar lo mejor posible esas largas horas en estas urnas sociales que son los centros de trabajo. ( perdón por la crítica, pero me sale del fondo del corazón)
Lo más bacán de todo, es que a veces, no tan raras veces, me pagan por hacer lo que quiero: teatro, actuar, crear, hacer proyectos culturales ( que impliquen estar de un lado al otro) o a veces yo me los invento... en ocasiones como éstas en las que los grandes cascarones empresariales se quedan casi sin habitantes, y digo casi; pues todavía quedamos algunos como yo que no pueden vacacionar pero se las ingenian para soñar, imaginar y crear en este bosque de cemento.

(*) el verdadero oro de este siglo; ya hablaré de él en otro momento y de como siento a veces que me lo estan robando